Desde Ginealmería queremos compartir esta noticia que hace referencia a un estudio realizado en fechas recientes, basado en el análisis de estudios realizados desde el año 1993 al 2014 sobre el acceso a la práctica de aborto en los países desarrollados.
Dicha revisión bibliográfica, concluye que las mujeres se enfrentan a desigualdades significativas en el acceso al mismo y también en relación a la calidad de esta prestación sanitaria en los países desarrollados.
Las causa principales de esta situación según dicho estudio, es la falta de profesionales formados en las diferentes técnicas de aborto provocado, el acoso y el estigma que acompaña a esta prestación sanitaria, la falta de información o la falta de recursos para costear el procedimiento.
También informa de que las mujeres en nuestro país prefieren realizarse la interrupción del embarazo por Aspiración (aborto Instrumental) y no por Medicamentos (aborto farmacológico). Ambos métodos avalados por la OMS, hasta las nueve semanas de embarazo.
El estudio refleja una situación muy dispar en Europa en relación al uso de un método u otro y señala que en Francia por ejemplo el aborto farmacológico se usa en el 50% de los casos, aunque no informa de los motivos. Según la feminista francesa, Francois Laurant, que participó en las jornadas de ACAI » El aborto seguro una obligación moral» , muchas de estas mujeres no pueden elegir el método para interrumpir su embarazo por la falta de profesionales capacitados para practicar abortos por aspiración en muchos lugares de Francia.
Por todo lo anterior compartimos la opinión de Blanca Cañedo » las regulaciones de aborto que respetan el derecho de la mujer a decidir sobre su maternidad con ser imprescindibles no son suficientes, sino se garantiza la formación de profesionales y no se dota de recursos económicos dicha prestación sanitaria junto con la mejora de la formación y la educación » solo de esta manera se podrá garantizar que la mujer pueda acceder a un aborto de calidad y que pueda elegir el método con el que interrumpe su embarazo.
El estudio concluye en términos semejantes, realizando una serie de recomendaciones para mejorar el acceso a esta prestación sanitaria: mejorar la formación del personal sanitario y aumentar el número de servicios disponibles.